[Diario de un emprendedor]
CapÃtulo 16: ¿Por qué lloras?
En la vida de todo emprendedor (y el que lo niegue miente) va a llegar esta pregunta algún dÃa a su cabeza. Puede ser en una época en la que esté cansado, en la que venda menos, en la que algún cliente le arme una “putadilla” o en que simplemente se canse de pagar 300 € de autónomos en meses que igual facturó 100 € y encima sabe que después de cotizar, quizá 2 años, cierre su pequeño negocio y no tenga ni prestación de desempleo.
La pregunta es: ¿Hasta cuándo voy a seguir yo con esta historia? ¿Cuánto tiempo puedo aguantar sin sueldo o cobrando 400 euros o menos? ¿Me merece la pena seguir arriesgando mi patrimonio o el de mi familia porque los bancos cada vez que quiero un crédito tengo que avalar hasta con los “gayumbos”?
A mi me llegaron todas esas cuestiones las navidades del año 2008. Nuestra empresa tenÃa 2 años y medio de vida y se supone que ya deberÃa ir cogiendo cierto empaque, pero no, las cosas no iban bien… Poco a poco perdÃamos ventas y clientes y no conseguÃamos hacer puntos de venta nuevos. El problema es que todos los meses llegaban unos gastos fijos que no cubrÃamos y ya estábamos con créditos abiertos desde el año 2006 que tenÃamos que pagar.
La gota que colmó el vaso fue a finales de Diciembre de ese año. Eva y yo tenÃamos un sueldo de entre 300-400 euros según fuese el mes. SÃ, lo que os cuento, y no exagero nada. Algún mes incluso menos o nada. Y uno, con casi 29 años, no veÃa la luz al final del túnel.
Tus amigos empiezan a manejar más dinero, a hacer viajes, a comprarse pisos y te ves en una situación jodida que muchas veces es difÃcil de gestionar mentalmente.
En fechas navideñas se supone que vendemos más. En nuestro caso es bastante “leyenda urbana”. Los meses que más facturamos son Mayo, Junio y Julio porque nos piden muchas cremas corporales, como el Autobronceador, el AnticelulÃtico o el Exfoliante Corporal… Esta reflexión viene a cuento porque aquellas navidades, casi el dÃa de Nochebuena, llevábamos ingresados unos 2000 euros que no nos llegaban ni para cubrir los gastos, cuando las previsiones decÃan que a esas alturas de mes deberÃamos estar como mÃnimo multiplicando por 4 esa cifra…
Autobronceador Eva Rogado 200 ml.
Yo vivÃa en El Coto. Mucho conoceréis esa zona de Gijón y por las tardes iba caminando hasta la ofi de la calle Santa LucÃa en el barrio de El Carmen. Tardaba aproximadamente unos 30 minutos. Aquella tarde estaba muy apesadumbrado. Llamé a mi hermana de la que iba paseando, que ya estaba allÃ, para encontrar consuelo pero al final terminamos discutiendo y reprochándonos cosas. Seguramente si no fuésemos hermanos aquel dÃa cada uno hubiese “tirado” para sitios diferentes y puede que ni mantuviésemos la amistad.
Yo le decÃa que hasta cuando Ãbamos a estar ganando esta mierda de sueldo, que estaba harto, que no querÃa seguir en Eva Rogado y mi hermana no sabÃa que contestarme.
Quizá tensé la cuerda demasiado, preso de los nervios, la incertidumbre y la impotencia. Sin duda me arrepentà y maldije mi actitud al cabo de unos minutos.
El problema es que cuando eres emprendedor tienes que ser muy paciente, calmado y mirar las cosas con perspectiva. Es fácil decirlo pero muy complicado desarrollarlo. En el mundo en que vivimos no solemos dedicar el tiempo suficiente para dar estabilidad a los proyectos. Buscamos el corto placismo y repito, un emprendedor debe intentar consolidar su proyecto y esto sólo se consigue a base de tiempo y experiencias vividas…
Cuando llegué a la ofi me encontré a Eva con lágrimas en los ojos…
A lo que solo pude reaccionar diciendo de forma bastante estúpida: ¿Por qué lloras?
Nueva Tienda On-Line Eva Rogado