[Diario de un emprendedor]
CapÃtulo 4: La carpeta rosa (parte 1ª)
La siguiente historia se remonta a finales del año 2010. Al mes de Diciembre; aunque si soy sincero todo habÃa comenzado unos meses antes. Concretamente el 28 de Junio de ese mismo año…
Después de la presentación de Esencia de Gijón nos hacÃamos cábalas de donde se podrÃa comercializar nuestro nuevo producto estrella. Pensábamos en diferentes lugares de Gijón a parte de nuestros habituales puntos de venta. Necesitábamos otros “enclaves” porque en Oviedo y Avilés no conseguimos hacer una buena implantación y las ventas no funcionaron.
Dimos en el clavo…: La Laboral, El Botánico, El Parador, El Acuario, El Puerto Deportivo, InfoGijón, El Hotel Silken… se unieron a la causa ER y matamos dos pájaros de un tiro. Por un lado nuestra cuota de mercado creció y además estábamos en alguno de los lugares más emblemáticos de la ciudad.
La empresa despegó. Las ventas subÃan y el perfume “Gijón” hizo que nuestras cremas fuesen más conocidas. Se nos abrieron puertas y Eva Rogado gozaba de buena salud. Estábamos entusiasmados. Recuerdo que incluso nos llamó la COPE en un programa nacional para que Eva hablase del perfume.
Pasaron los meses y evidentemente el “boom” del lanzamiento se fue apagando (hasta el año 2012 donde volvió a resurgir, en otro capÃtulo os contaré sobre ello)
El mes de Diciembre llegó y nos pilló planificanco la campaña de Navidad. Nos llamaron de LNE para una entrevista (leer) y pensamos, ¡qué bien nos viene algo de publicidad justo ahora que llega una época fuerte de ventas!
CUCA ALONSO se presentó en la oficina de la calle Santa LucÃa. Fue encantadora con Eva y las preguntas eran bastantes personales y más entretenidas que en ocasiones anteriores. Pero bien, una entrevista más pensé… Nos la hicieron el viernes 3 y nos prometió que se publicarÃa el domingo 5.
Por aquel entonces, personalmente, no estaba pasando por uno de mis mejores momentos y recuerdo que ese finde para “animarnos” la pandilla de amigos nos escapamos a León. De fiesta 😉
Cuando amanecà el domingo lo que menos me acordaba era que se iba a publicar una entrevista en LNE. Los whasapp de amigos y las llamadas de mi familia me lo recordaron… (que guay pensé. Era una buena manera de pasar la “resaca” de vuelta a Asturias).
(Dicha entrevista tenÃa una pregunta bastante “teledirigida” y por fortuna habÃa caÃdo en las manos adecuadas y fue leÃda por unos ojos influyentes…)
No creo en la suerte, pero sà en los ligeros “destellos” que va dejando a su paso por la vida de las personas y que tienes que “intentar” reconocer y aprovechar.
El jueves de la semana siguiente fue un dÃa lluvioso. Iba por la calle Cabrales a la altura de musical Tomy. Lo recuerdo perfectamente. SerÃan las 18:00 h aprox. Antes de irme habÃa desviado el teléfono fijo de la ofi al móvil. Me subà al coche y conecté el manos libres.
El teléfono sonó. Número oculto. ¿Quién será? ¡Que fastidio esto de los número ocultos, pensé…! Lo descolgué sin saber si era una llamada personal o estaban llamando al trabajo.
– “Buenas tardes, Soy Eduardo GarcÃa, jefe de compras de la sección de perfumerÃa de El Corte Inglés… ¿Por qué no tengo yo el perfume de Gijón en mi centro? ¿PodrÃa hablar con el gerente…?
Tierra trágame pensé…
– “SÃ, soy yo…” (le contesté medio balbuceando…)
-“Me gustarÃa conocerle lo antes posible y ver su producto para una posible implantación. Las Navidades se nos echan encima y de hacer algo hay que hacerlo ya… PodrÃan venir a Madrid a la central de compras en Hermosilla?
-“¡¡Por supuesto!!!… Si quiere mañana estamos allÃ…
Terminamls concretando la cita para las 11:00 de la mañana siguiente. Llamé a mi hermana para comentárselo. Que felicidad…
Si nos llaman ellos seguro que tenemos muchas opciones. Miré unos vuelos y la broma se nos iba a 300 euros por barba… (¡¡Casi perdÃamos la ganancia de esas posibles ventas!!)
“Nada, pensé. A las 5:00 de la mañana nos vamos para Madrid en coche… Voy a volver a la oficina a preparar un dossier chulo y todo solucionado…)
(¿por qué serÃa tan impulsivo? Otra vez las prisas nos iban a jugar una mala pasada… o buena tal vez… 😉
por Kike Rogado
Madre mÃa que interesante me has dejado con la intriga..