Esencia de Gijón
GIJÓN de Eva Rogado
Desde Eva Rogado consideramos a GIJÓN como una ciudad para ser vivida con los 5 sentidos.
Ya sabemos a que sabe GIJÓN: a sal. El sentido de la vista queda totalmente descubierto con sus paisajes.
El oído podemos relacionarlo con sus cánticos tradicionales.
Nos vamos a permitir reflejar el sentido del tacto con el “tacto” que tienen sus gentes. Y nos falta saber a que hueleGIJÓN, que es lo que vamos a descubrir. Es cierto que GIJÓN es una ciudad orgullosa de sí misma, y los gijoneses, y en general todos los asturianos, estamos muy orgullosos de nuestra tierra. Se nos llena la boca cada vez que salimos de nuestras fronteras, hablando de “lo nuestro”. Y del mismo modo, la gente que viene de fuera queda encandilada y enamorada de la ciudad, cautivada con los 5 sentidos, con una sensación de la que no le será fácil olvidarse.
La idea de hacer una colonia para GIJÓN, es un proyecto que surge hace años. Viendo que había otras ciudades con su propio aroma, nos pareció interesante crear una esencia de GIJÓN, para que todo el mundo que pasara a conocer nuestra ciudad, y por supuesto los que la disfrutamos día a día, pudieramos llevar una parte de ella, de su aroma en nuestra piel. GIJÓN es una ciudad única, ni mejor ni peor que otras, sino totalmente diferente y especial.
Por eso hemos intentado crear una aroma que la defina como tal, un aroma con personalidad propia. Para poder llegar a crear el olor de GIJÓN tuvimos en cuenta su cultura y su historia. Sus playas, sus calles, sus gentes y todos esos valores que hemos visto en el video que representan a nuestras ciudad, que mezclados con el aroma de sus raíces, es lo que hemos querido concentrar en “Esencia de GIJÓN”.
Una vez definido esto, se hizo una cata olfativa entre 100 personas, tanto de dentro como de fuera de nuestra ciudad, para conocer como percibe la gente a GIJÓN, tanto desde aquí como de los diferentes lugares, incluso con gente que nunca había estado en nuestra ciudad.
Y el resultado es lo que os mostramos.
¿Y a que huele GIJÓN?
Pensamos en GIJÓN como un verdadero paraíso natural, un paraiso dentro del paraíso, donde se puede respirar y sentir la energía de sus playas y la transparencia de ese mar que nos rodea y protege. El olor a Cantábrico, tan característico y peculiar, envuelve a nuestra ciudad y se respira en cada uno de sus rincones. Para representar esta frescura “ Esencia de GIJÓN” tiene una salida frutal, con notas cítricas, acompañada, o más bien escanciadas, de gotas afrutadas de manzana. Siguiendo con los valores en los que nos hemos inspirado, algo muy característico de GIJÓN son sus calles. En ellas se respira libertad, te invitan a disfrutar de la vida, a vivir el día y la noche de una manera mágica, exótica y diferente.
GIJÓN se vive en la calle.
” Vivir en Gijón es vivir Gijón “
Para ello hemos utilizado como gotas de fondo el sándalo, cuyos efectos afrodisíacos crean una sensación de bienestar única. Es un aroma que invita a romper con la rutina y hace renacer la sensualidad y la atracción. Sus calles son testigo de todo lo que ocurre en la ciudad. Por eso con este aroma pretendemos que se recuerden los encuentros y los paseos por nuestra ciudad como una experiencia única e inolvidable. Y algo que es realmente característico y excepcional de GIJÓN, es la hospitalidad de sus gentes.
Siempre se suele decir que lo importante no es el sitio, sino de la gente de la que te rodeas. Las personas cuando visitan GIJÓN, se sienten como en casa. Y los que vivimos en ella, no la cambiaríamos por ningún otro lugar del mundo. Para representar esto hemos utilizado la rosa como nota de corazón. El aroma a rosa representa el amor y la ternura. Al mismo tiempo el regalo de una rosa es algo sencillo, virtud del carácter de los gijoneses que hacen de GIJÓN una ciudad con una belleza y calidez especial.
La energía y las frescura de las notas cítricas y afrutadas de la manzana , la sensualidad y liberad del sándalo, y la ternura y la sencillez de la rosa, se han unido para formar la “Esencia de GIJÓN” que hoy os presentamos, esperemos que nos guste y todos podamos llevar en nuestra piel, y que pueda ser, el aroma del alma.