[StylER of Life] Todas las bodas son motivo de alegrÃa y celebración. Pero el pasado fin de semana se casaba Diegui: una de esas personas que donde va triunfa.
Lo conocà gracias a mi brother Kike Rogado, y en cuanto le vi supe que se quedarÃa en mi vida para siempre. La amistad se demuestra con el paso del tiempo, y la nuestra cada vez se ha hecho más fuerte, gracias a disfrutar muchos momentos de alegrÃa, compartir los no tan buenos, y reÃrnos y llorar en esto que se llama “el vivir”.
Le he conocido algún que otro novio, pero cuando el americano Kevin apareció, ya olà en el ambiente, que “nos iba a dar mucha guerra”.
Todos nos enamoramos de nuestro Juan Pardo americano* por su saber estar y su gran lado humano
* más adelante en las fotos podréis observar su parecido con el famoso cantante español.
Asà que en el “StylER of Life” de esta semana os hago la crónica de:
“La gran boda astur-americana: Diego & Kevin Wedding”.
Cuando Diego me dijo que se casaba, no dude ni un momento que eso no iba a ser una “boda normal”: de personas especiales, salen acontecimientos de la misma categorÃa.
Por supuesto no me equivoqué lo más mÃnimo. Asà que vamos a ir paso a paso para no perdernos de detalle del gran evento.
Todo empezó el miércoles. Tuve el honor de ser testigo y dejar mi firma para la posteridad, en el enlace de Diego & Kevin.
Ya se han casado, ya son “marido y marido”. El primer chin-chin, pero esto no ha hecho más que empezar.
Por la noche unos vinitos y los primeros bailes de festejo. El jueves cenita en Terra Astur, para que los invitados extranjeros se “fartucaran” un poco. El viernes la espicha pre-boda…
Me rÃo yo de las bodas gitanas comparada con la astur-americana.
Y por fin llega el gran dÃa. Hasta el tiempo se vino de boda, y tuvimos un sol espléndido.
Lugar del enlace Hotel Villa Rosario en Ribadesella. Un enclave magnÃfico, que los novios decoraron con un gusto exquisito.
Los acordes del arpa y el violÃn dan paso a los novios. Impresionatemente guapos y elegantes. Perfectamente combinados en naranja y gris, fue un momento muy emotivo.
El hermano de Diego y la hermana de Kevin fueron los encargado de “oficiar la ceremonia” . Y un amigo de Kevin y la menda de decir unas palabras a los novios.
Luego ellos leyeron sus votos, que nos habÃan preparado en un sobre en español-inglés, para que todos pudiéramos compartir ese momento.
Nos obsequiaron con una jarra personalizada con nuestros nombres, una miniatura de Esencia de Gijón , y un CD con la música de la boda, adornado con las pinceladas de mi adorada Esther Morán Creative .
¡¡¡Empieza la fiesta!!! Diego por su carácter extrovertido y generoso va “dejando huella” allà por donde pasa. Asà que en un dÃa como éste, todos nos reunimos para acompañarle.
Un motivo más de fiesta, porque nos volvimos a reencotrar gente que hace mucho tiempo que no nos veÃamos, con lo cual, creo que en ningún sitio del mundo en esos momento habÃa más “love is in the air”.
Un ambiente extraordinario. Un “buen rollo” estupendo, porque las persona que allà se dieron cita, eran “aún más guapas por dentro que por fuera”.
Comida, bebida, risas, piropos, besos, abrazos… No falto nada para ser un dÃa, perfecto. Hasta una increÃble puesta de sol, se alió con nosotros.
Llega la hora de partir la tarta y el baile nupcial. La emoción invadió al personal, y se escapó alguna que otra lagrimilla.
La fiesta se va acabando y antes de irme quiero dar las gracias a Diego y Kevin, por habernos invitado a compartir este dÃa con ellos. Dos personas increÃbles, como pocas he conocido.
OS ADORO!!!
Quiero dejaros este vÃdeo, y aprovechar para revindicar a raÃz de lo acontecido en Orlando el pasado viernes, el amor incondicional, el motor que mueve el mundo, y la mejor arma que tenemos para combatir contra ellos.
De aquà en adelante lo que pasó en Ribadesella, se queda en Ribadesella.
¡¡¡ Vivan los novios!!!