La bolsas es un problema estético, que sufren indiferentemente hombres y mujeres de cualquier edad, que nos da “mucha guerra”, y hacen que la mirada tenga una apariencia triste y envejecida.
Son acumulación de grasas y lÃquidos. En la piel que hay debajo del ojo, tenemos una especie de “cavidades”, donde se alojan lÃquidos y grasas. En ocasiones, no se distribuyen uniformemente, se acumulan más en unas cavidades que en otras, y esto da lugar a que se formen las bolsas.
¿Por qué se producen?
Una de las causas por las que se producen las bolsas es la retención de lÃquidos.
Esta zona está menos drenada que otras partes de la cara. El exceso de volumen de agua y otros lÃquidos, tienden a acumularse allÃ, provocando un tipo de bolsas que cuando las presionamos se notan relativamente blandas.
Este exceso de lÃquidos, produce a su vez acumulación del tejido adiposo, dando lugar a otro tipo de bolsas.
En ambos casos, la solución pasa por activar la circulación de la zona, para que ese lÃquido fluya, se aloje en sus “cavidades”, y disminuya la hinchazón.
Por eso los contornos de ojos para tratar la bolsas, deben tener principios activos, con esas propiedades como el Extracto de Ruscus. Actúa contrayendo los capilares sanguÃneos y los glanglios linfáticos, drenando la parte inferior del ojo.
¿Cuál es el truco para mejorar la eficacia del contorno?
Para ayudar a eliminar mejor las bolsas, es recomendable, aplicar por las noches el contorno de ojos como si fuera una mascarilla.
En vez de darle toquecitos para que la crema se absorba, dejar una cantidad del producto, sobre el hueso debajo del ojo. No hace falta ponerlo más arriba, justo encima de la bolsa, porque el propio calor del cuerpo, nos mueve la crema. Es cuando pueden aparecer los problemas, que vaya el producto al ojo y nos moleste.
Con esto lo que conseguimos, es que mientras dormimos, esté actuando más tiempo el producto. Nuestro cuerpo que en estos momento tiene otro ritmo de trabajo, consigue que se active más la circulación y vaya disminuyendo la hinchazón.
