Los brazos los solemos tener abandonados sin darles la misma importancia que la resto del cuerpo (piernas, abdomen y glúteos) y de repente…zas! Aparece la flacidez!!!

Nos encontramos con el brazo descolgado y la pérdida de tonicidad, y la ropa de manga corta y tirantes ya no nos sienta tan bien como antes.

La flacidez es la pérdida de firmeza de la piel a consecuencia de la degradación de las fibras de colágeno y elastina, dejando la piel y los músculos flojos. También pude aparecer el problema cuando adelgazamos, ya que el brazo tiende a descolgarse tanto por la musculatura como por el exceso de piel, ya que la piel de los brazos es más frágil, y tienen menos fibras de sostén. También es una zona a acumular la celulitis, debido a la retención de líquidos  y al engrosamiento de las células grasas.

La buena noticia es que podemos utilizar la misma crema que usamos para las piernas, glúteos y abdomen en los brazos. 

La mala que los resultados no son inmediatos. La importancia para unos buenos resultados es la constancia. 

Si la crema del rostro la aplicamos todos los días y vemos los resultados… ¿por qué no iba a suceder los mismo en el resto del cuerpo y en este caso en los brazos?

Anticelulítico reafirmante y reductor Eva Rogado con L-Carnitina

No se puede empezar a usar este tipo de tratamientos pensando que se van a obtener los resultados deseados en una semana. Para ver los resultados es necesario ser constante en nuestro plan y aplicar el tratamiento por lo menos 6 meses. Pero el resultado de unos brazos más torneados y sin piel sobrante darán a nuestra figura un aspecto más esbelto y juvenil.